prueba misiles balísticos
Washington –
La Marina de Estados Unidos confirmó este martes que, entre el 17 y el 21 de septiembre, lanzó desde un submarino de la clase Ohio cuatro misiles balísticos intercontinentales Trident II D5 frente a la costa este de Florida.
Aunque el comunicado oficial subrayó que los ensayos “no se realizaron en respuesta a ningún acontecimiento internacional”, la noticia llega en un contexto de tensión creciente con Venezuela debido al despliegue militar estadounidense en el Caribe.
Uno de los lanzamientos, realizado el pasado domingo, “iluminó el cielo nocturno y fue visible desde Puerto Rico”, detalló la Marina. El dato llamó la atención, pues los misiles fueron disparados a más de 1,500 kilómetros de distancia del territorio caribeño, lo que muchos analistas interpretan como un mensaje estratégico dada su proximidad con Venezuela.
Características del armamento
Los misiles Trident II D5, diseñados para ser lanzados desde submarinos, poseen un alcance estimado de 12,000 kilómetros y capacidad para portar cabezas nucleares, lo que los convierte en un pilar de la disuasión estratégica de Washington.

Contexto geopolítico
Desde agosto, EE. UU. ha reforzado su presencia militar en el Caribe con al menos ocho buques de guerra, incluyendo destructores, navíos de asalto anfibio y un submarino de propulsión nuclear clase Los Ángeles —sin capacidad nuclear—.
Además, se han desplegado en Puerto Rico cazas F-35B de última generación, reforzando la percepción de que el país busca aumentar su capacidad de respuesta ante amenazas regionales, particularmente en lo relativo al narcotráfico procedente de costas venezolanas.
Reacciones en la región
Si bien Washington insiste en que estas maniobras son rutinarias, observadores regionales señalan que la coincidencia con el incremento de tensiones con Caracas eleva la percepción de un escenario de disuasión estratégica que podría tener repercusiones en la estabilidad regional.