El Papanicolau es una herramienta vital para la prevención del cáncer de cuello uterino. Este tipo de cáncer se origina en las células que recubren el cuello uterino, que es la parte inferior del útero y conecta el cuerpo del útero con la vagina. Las células comienzan a crecer sin control cuando se transforman en cancerígenas.
Históricamente, el cáncer de cuello uterino fue una de las principales causas de muerte por cáncer entre las mujeres en Estados Unidos. Sin embargo, gracias al aumento en la adopción de la prueba de Papanicolau, la tasa de mortalidad disminuyó drásticamente. A pesar de este progreso, la tasa de mortalidad ha mantenido cierta constancia durante la última década.
El Papanicolau, también conocido como citología vaginal, implica tomar células del cuello uterino. Esta prueba tiene como finalidad detectar alteraciones precancerosas en el cuello del útero en una etapa temprana. Al identificar estos cambios celulares a tiempo, es posible iniciar tratamientos que resulten eficaces contra el desarrollo del cáncer. De hecho, el cáncer cervicouterino es en un 90% prevenible si el Papanicolau se realiza con regularidad.
Se recomienda que todas las mujeres que hayan iniciado su vida sexual se sometan a la prueba de Papanicolau al menos una vez al año durante dos o tres años consecutivos. Si los resultados son negativos, la prueba debe repetirse cada tres a cinco años, siempre y cuando no existan factores de riesgo, y puede continuar hasta los 65 años.
¿Cómo se realiza el Papanicolau? Se utiliza un instrumento médico llamado espéculo, insertado en la vagina, para recoger muestras de células del endocérvix y exocérvix. Estas células se colocan en una lámina de vidrio y se envían al laboratorio para su análisis.
Consejos para un Papanicolau Preciso:
- No programes tu cita médica durante tu periodo menstrual. El momento óptimo es al menos 5 días después de finalizar tu menstruación.
- Evita el uso de tampones, espumas, gelatinas espermicidas, cremas vaginales, humectantes, lubricantes o medicamentos vaginales 2 a 3 días antes del Papanicolau.
- No realices duchas vaginales 2 o 3 días antes del examen.
- Abstente de tener relaciones sexuales 2 días antes de la prueba de Papanicolau.